42. Meditadores que no están seguros
Hoy en día, muchas personas que se interesan en la práctica de la meditación se encuentran extremadamente confundidas y dudan acerca del modo correcto de practicar. Esto pasa sobre todo con personas que apenas comienzan a interesarse en la práctica, porque muchas veces los maestros de meditación dan consejos contradictorios acerca de cómo practicar. Y lo que es aún peor, en lugar de explicar las cosas de una manera clara y objetiva, muchos maestros parecen reacios a admitir que otros maestros y métodos de práctica también pueden ser correctos. No son solo unos pocos los que muestran un auténtico desdén por métodos ajenos.
Dado que muchas personas con dudas de este tipo acudían a pedir consejo a Luang Pu, frecuentemente le escuché explicar lo siguiente:
«Cuando comienzas a practicar meditación, puedes comenzar con cualquier método porque todos llevan al mismo resultado. La razón de que existan tantos métodos es que las personas tienen propensiones y diferentes. Es por eso que debe haber distintas imágenes para enfocarnos y palabras para repetir—tales como ‘Buddho’ o ‘arahang’— sirven de método inicial y proveen a la mente de un punto alrededor del cual recogerse y asentarse. Cuando la mente se encuentra colectada y en calma, la palabra que utilizamos para meditar desaparecerá por sí misma, y es justo ahí donde todos los métodos se encarrilan en el mismo camino, con el mismo sabor. En otras palabras, tienen el discernimiento como cualidad suprema y la liberación como su esencia».