57. Vacío

Tiempo después, Ajaan Bate, junto con otros dos monjes y un gran número de personas laicas, vinieron a presentar sus respetos a Luang Pu. Después de que Luang Pu aconsejara a los principiantes sobre cómo practicar, Ajaan Bate le preguntó a Luang Pu acerca del consejo que había recibido en su última visita: «Soltar todos los objetos es algo que sólo puedo hacer momentáneamente» –dijo– «pero no puedo permanecer así por largos periodos de tiempo».

Luang Pu respondió:

«Incluso si puedes dejar ir todos los objetos durante un momento, si realmente no estás observando la mente, o tu atención (sati) no lo abarca todo, puede ser que nada más hayas soltado un objeto burdo y te hayas movido a uno más sutil. Así que debes parar todos los pensamientos y dejar que la mente se asiente en la nada».